Aprende a deshidratar el kiwi en casa y desbloquea el snack saludable definitivo
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Sostenibilidad
El kiwi es de esas frutas que nunca fallan. Tiene sabor, textura, color y una lista de beneficios que parece no acabarse: vitamina C, potasio, antioxidantes, fibra y folato. Pero lo mejor es que no necesitas una ocasión especial para disfrutarlo. Puedes tomarlo en el desayuno, como snack entre horas, en una ensalada o incluso como postre ligero.
Y si pensabas que ya habías probado todas sus formas posibles… espera a descubrir lo que pasa cuando lo deshidratas. Sí, como lo lees: hoy te contamos cómo deshidratar el kiwi en casa y abrir la puerta a un snack saludable, crujiente y lleno de posibilidades.
Kiwi deshidratado: más que un snack
El kiwi deshidratado es uno de esos pequeños descubrimientos que pueden cambiar tus hábitos sin esfuerzo. No solo conserva todos sus nutrientes, sino que su sabor se intensifica, adquiere una textura crujiente y se convierte en un tentempié perfecto para cualquier momento del día.
¿Quieres un bocado rápido para llevar en el bolso? ¿Un toque especial para tu ensalada o yogur? ¿Un picoteo sano para el cine en casa? El kiwi deshidratado lo tiene todo. Además, al eliminar el agua, se alarga su conservación sin necesidad de añadidos ni conservantes. Solo fruta, y punto.
Cómo deshidratar el kiwi paso a paso
Si te estás preguntando cómo deshidratar el kiwi en casa, aquí tienes una buena noticia: no necesitas equipos especiales ni horas de preparación. Solo tu horno, un poco de tiempo… y kiwis Zespri bien maduros.
Precalienta el horno. Empieza por calentar el horno a 90 °C. Es importante mantener una temperatura baja para secar la fruta lentamente sin quemarla.
Pela y corta el kiwi en rodajas. Hazlo con cuidado y asegúrate de que las rodajas tengan un grosor uniforme (ni demasiado finas ni demasiado gruesas). Así evitarás que se rompan o queden blandas.
Coloca las rodajas sobre papel de horno. Distribúyelas en una bandeja, dejando un poco de espacio entre ellas para que el calor circule bien.
Hornea durante una hora y media. Mantén una temperatura constante y vigila el proceso. Pasado ese tiempo, las rodajas deberían estar secas, pero aún con un color vibrante.
- Deja enfriar y guarda en un recipiente hermético. Una vez fuera del horno, espera a que enfríen antes de guardarlas. Puedes conservarlas durante varios días y usarlas como snack o en tus recetas favoritas.
3 recetas para darle un giro al kiwi
¿Ya dominas el arte de deshidratar el kiwi? Aquí tienes tres ideas sabrosas y diferentes para incluirlo —tanto en su versión deshidratada como fresca— en recetas que sorprenden por su sencillez y sabor:
1. Cucharitas de kiwi Zespri™ Green con mejillones y puerro
Esta receta es perfecta para un aperitivo ligero y sofisticado. Comienza cocinando unos mejillones al vapor y retirándolos de sus conchas. Aparte, pica finamente un puerro y saltéalo hasta que esté tierno. Pela y corta en cubitos un kiwi Zespri™ Green y mézclalo con los mejillones troceados, el puerro salteado, un chorrito de limón, una pizca de sal y aceite de oliva virgen extra. Sirve la mezcla sobre cucharitas individuales como tapa fresca y colorida. Ideal para sorprender.
2. Pasta con verduras salteadas y kiwi Zespri™ SunGold
Una forma distinta de disfrutar el kiwi es incorporarlo a platos calientes. Cocina tu pasta favorita (integral o sin gluten si lo prefieres) y, mientras tanto, saltea en una sartén calabacín, espárragos trigueros y cebolleta con un toque de aceite de oliva. Cuando estén al dente, añade la pasta cocida y mezcla todo bien. Justo antes de servir, incorpora láminas de kiwi Zespri™ SunGold cortadas finas. El contraste de la fruta con las verduras saladas crea un efecto refrescante delicioso. Puedes añadir unas semillas de sésamo o almendras laminadas para dar textura.
3. Caballa asada con col roja y kiwi Zespri™ Green
Para un plato principal completo, prueba esta receta rápida y con mucho color. Asa lomos de caballa al horno durante 10-15 minutos con un toque de aceite, sal y pimienta. Mientras tanto, corta col roja en tiras finas y mezcla con kiwi Zespri™ Green en rodajas, ajos frescos picados, hojas de menta y un poco de zumo de limón. Sirve la caballa sobre esta base vegetal. El resultado: un plato lleno de contraste, equilibrio y frescura.
Ahora que sabes cómo deshidratar el kiwi de forma fácil en casa, te llevas una nueva forma de cuidarte. Es práctico, es rico y es 100 % natural. Puedes usarlo para completar tus desayunos, como picoteo pre o post entreno, o incluso como parte de tus recetas dulces y saladas.
Y lo mejor de todo: al hacerlo tú misma, eliges el punto justo de textura, el tipo de kiwi y la cantidad que necesitas. Una forma sencilla de transformar una fruta de siempre en una opción nueva, divertida y saludable.